lunes, 29 de noviembre de 2010

Reflexiones de fin de año.



Estoy muy contenta con mi blog, por ahora agregando sólo aquello que leo y me gusta.

Pienso que un día vendrán a mi mente los duendes de la poesía o de la literatura y me ayudarán a expresar algunas ideas.
O que vendrá el momento en que sabré mirar mi corazón y comunicar lo que allí encuentre.

¿Qué será lo que encontraré? Espero haber atesorado cosas que me hagan sentir bien, paisajes por donde anduve, flores que contemplé, voces y música que oí, recuerdos, amores, la voz y la sonrisa de los niños, mis niños.
Las voces y las risas de mis alumnas que son tan jóvenes y tan llenas de vida, pero que a veces lloran por penas que, a edad tan temprana, en algún momento las invaden.
Cuánto me gustaría que fueran felices, que tuvieran una buena vida, que fueran respetadas y queridas.

En este fin de año escolar, pido a Dios que les conceda la gracia de ser fuertes para afrontar las dificultades, que no se rindan y sigan buscando su camino, el camino que sea mejor para cada una de ellas. Que puedan conservarse alegres y comunicativas, que cultiven la amistad y el compañerismo que hoy las une; que las encuentre alguna vez en la vida, felices, alegres, lindas, aplomadas, bellas mujeres.

Queridas alumnas: cuídense, quiéranse ustedes mismas y a sus seres queridos, sean muy, muy felices!

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